viernes, 14 de abril de 2023

LA GAVIOTA

 


 

[14]

 

LA GAVIOTA.

 ERMG

 

 

 


 

 No encontré el libro que estaba buscando, pero me topé con una biografía de Chejov, dentro de la cual hay un pase para el Teatro Gorki con una fecha exacta: 16 de diciembre de 1987. ¡Hace tantos años! Era hermoso, muy romántico ir al teatro en Moscú. En La Gaviota, dicen, Chejov se retrata con sus angustias de escritor. Hay gente sencilla, de pueblo. Intelectuales de provincia con sus problemas existenciales. Amores no correspondidos. Matrimonios que fracasan porque una de las parejas cree que se equivocó al hacer su elección en una época cunado el divorcio no era una opción. Un escritor decepcionado y no comprendido hasta por su propia madre se suicida. Precisamente el ticket estaba en una página con un pensamiento de Chejov subrayado por mí: “Creer en la inmortalidad del alma es una cobardía que reconforta”. Según el escritor y médico ruso no hay más nada después de la vida (¿o de la muerte? , la afirmación parece ser igual).

 

 


 

 

 

He recordado con melancolía muchos buenos momentos de mi vida estudiantil moscovita. Tenía mucha razón Frenando Savater cuando dijo que la máquina que mejor perpetua la memoria es la nostalgia.

 

TRAS LA HUELLA

 

13

TRAS LA HUELLA.

 

 ERMG



[Casa-Museo de Chéjov en Moscú. Fotografía: ERMG]

 

 Fui varias veces al teatro de Arte Antón Chéjov; asistí a las presentaciones de Las tres hermanas, el Jardín de los cerezos y la Gaviota, en varias oportunidades; y estuve ante la tumba de Antón Pávlovich Chéjov en el Cementerio Novodiévich,   siempre con flores frescas.

 

 


[Afiches de Las tres hermanas, el Jardín de los cerezos. Casa-Museo de Chéjov en Moscú. Fotografía: ERMG]

 

 

 


 

 

[Piezas teatrales. Casa-Museo de Chéjov. Fotografía: NM]

 

 

 


[Tumba de Chéjov en el Cementerio Novodiévich de Moscú]

 

EN EL MUSEO DEL TEATRO "CHÉJOV" DE MOSCÚ.

 

[12]

 

EN EL MUSEO DEL TEATRO “CHÉJOV” DE MOSCÚ.

 

 Edgardo Rafael Malaspina Guerra

 


[Museo del Teatro “Chéjov. Fotografía: NM]

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

VIERNES, 26 DE DICIEMBRE DE 2008.

11 grados bajo cero.

1

 


[Moscú en invierno. Fotografía: ERMG]

  La nieve sobre el suelo se ha convertido en hielo muy duro y resbaladizo. Dos hombres hacen comentarios sobre mi shapka (gorra grande que cubre la cabeza y parte de la cara)con ironía porque consideran que no hace tanto frío. Allá ellos que están borrachos y son muy osados (de la palabra oso) y salen con la cabeza descubierta. Yo también lo hacía cuando era joven y me echaba unos tragos de vodka.  En el Metro una valla publicitaria muy colorida contiene una serie completa de matriozkas con la inscripción: “El amor a la patria empieza por la familia. F. Bacon”. Un virtuoso toca el violín con un serrucho, y le sale una música bella y triste. Un poco más allá, un hombre con tacones danza a la española.

2




[Plaza Roja. Fotografía: ERMG]

 

 

 Vamos a la Plaza Roja, donde el alcalde de Moscú, Luzhkov, inaugura oficialmente las fiestas de Navidad y Año Nuevo. Dijo, acompañado de Ded Moroz (San Nicolás) y Snigurochka (La Niña de las Nieves), que la Navidad es una maravilla especialmente para los niños. (Antes, en el socialismo, era un invento imperialista y no se celebraba). Luego encendió las luces de un árbol, adornado con muchos juguetes y bombillas, colocado cerca del público.

 


[Navidad rusa. Fotografía: ERMG]

 


[Fotografía: NM]

El árbol de navidad fue prohibido por los bolcheviques, quienes lo catalogaron de vestigio religioso del capitalismo. En 1935 algunos comunistas ucranianos convencieron a Stalin para que permitiera su vuelta a las casa y en las calles. El árbol regreso para acompañar la fiesta de año nuevo, pero sin la navidad, la cual volvió con la desaparición de la URSS.

3




[Con Lenin]

 

Unos conjuntos infantiles animaron la velada con cantos y bailes. En otro lado de la Plaza Roja están los dobles de Lénin y Stalin. Les pregunto por Brezhnev, quien también se aparee de en vez en cuando, y contestan que no lo han visto hoy. Tenía razón Marx, cuando corrigió a Hegel , quien dijo: “la historia se repite”. El de Tréveris agregó: “La primera vez la historia es en serio, la segunda sucede como parodia”.

 


[Con Stalin]

4




[Vestimentas originales de muchas obras teatrales usadas para el estreno, como Las Tres Hermanas, El Jardín de los Cerezos. Fotografía: NM]

 

 

 Enrumbamos nuestros pasos hacia el Museo Chejov de Teatro. Allí se exponen las vestimentas originales de muchas obras teatrales usadas para el estreno, como Las Tres Hermanas, El Jardín de los Cerezos y Los días de los Turbín, esa pieza de Bulgakov sobre el enfrentamiento entre rojos y zaristas durante la revolución, y a la que Stalin asistió más de cincuenta veces para recordar sus momentos gloriosos de bolchevique triunfador.

 Están también los sillones, desde donde dirigieron sus representaciones Stanislavski y Nemírovich- Danchenko, los innovadores del teatro ruso.

 

 


[Baúl que llevó Chéjov a la isla de Sajalín. Fotografía :  NM]

 

 Una de las joyas del museo es el baúl que usaba Chéjov para sus viajes, y que llevó incluso a la isla de Sajalín, donde realizó una investigación médica.

 


[Sillón desde donde dirigieron sus representaciones Stanislavski y Nemírovich- Danchenko, los innovadores del teatro ruso. Fotografía: NM]

 


[Konstantìn Stanislavski y Vladimir Ivanovich Nemiróvich-Danchenko. Moscú. Fotografía: NM]

 

 (Diario de Moscú. Premio Fundarte 2010)

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


 

EN EL MUSEO DE CHÉJOV EN MOSCÚ.

 

[11]

 

EN LA CASA-MUSEO DE CHÉJOV EN MOSCÚ.

 


[Entrada de la Casa-Museo de Chéjov en Moscú. Fotografía :NM]

 

En el 2006 visité el museo de Chéjov en la calle Sadovoe-Kudriskoe de Moscú. Lo creó la familia del escritor en 1912. Allí vivió Chéjov desde 1886 hasta 1890 y allí escribió muchos de sus relatos. Se mudó a esa casa en la época cuando no duraba más de un día haciendo un cuento. “Los escribía con la misma rapidez que un reportero hace una nota sobre un incendio”, afirmaba el propio escritor. En el museo están la sala; el cuarto de trabajo, donde Chéjov consultaba a sus pacientes y escribía sus libros (lo hacía escuchando música, que tocaba en un piano su hermano Nicolás.

 


[Escritorio de Chéjov. Fotografía: NM]

 


[Placa del doctor Antón Chéjov. Fotografía: NM]

 

La música preferida de Chejov era el Preludio nro. 6 de Chopin ) ; y los dormitorios de él y sus familiares.

 

 


 

 El guía nos muestra el título de médico obtenido en la Universidad de Moscú y nos cita unas palabras del escritor: “No tengo dudas, las clases de medicina influyeron enormemente sobre mi actividad literaria. Ellas aumentaron el diapasón de mis observaciones, me dieron muchos conocimientos, cuyo verdadero valor para mí como escritor lo puede entender sólo un médico…la medicina es mi esposa y la literatura es mi amante.”  Vemos su maletín médico, un mortero para preparar remedios, una campanita…Más allá una fotografía de Chaikovski, quien lo visitó en 1889 para agradecerle la dedicatoria del libro Gente Triste. La biblioteca que una vez estuvo aquí, -dice el guía. Chéjov ordenó entregarla después de su muerte a su ciudad natal , Tagangor.




[Algunos libros de la biblioteca de Chéjov. Fotografía: NM]

 

 

 Luego agrega, mostrándonos una foto: vean a Chéjov en la clínica atacado por la tuberculosis en 1897…Tolstói lo visitó y hablaron de la inmortalidad del alma…Salimos del museo y yo recuerdo unas palabras de Chéjov sobre ese tema: “Creer en la inmortalidad del alma es una cobardía que reconforta”.

 

 

 

 

 

 

 


 

 

 

CONFERENCIA DE EDGARDO R MALASPINA GUERRA SOBRE ANTÓN CHÉJOV(“CHÉJOV, MÉDICO Y LITERATO) EN LA SOCIEDAD VENEZOLANA DE HISTORIA DE LA MEDICINA (CARACAS, 6 DE OCTUBRE DE 1996).

 

[8]

CONFERENCIA DE EDGARDO R MALASPINA GUERRA SOBRE ANTÓN CHÉJOV(“CHÉJOV, MÉDICO Y LITERATO) EN LA SOCIEDAD VENEZOLANA DE HISTORIA DE LA MEDICINA (CARACAS, 6 DE OCTUBRE DE 1996).

 

RESEÑA DE LA REVISTA DE LA SOCIEDAD VENEZOLANA DE HISTORIA DE LA MEDICINA.







[Palacio de las Academias donde funciona la SVHM en Caracas]

 

Malaspina, E., Chejov: Médico y literato. Revista   de la Sociedad Venezolana de Historia de la Medicina , 1997. 46(71, Junio, Tomo I): p. 13. Se presenta un trabajo sobre el destacado médico y escritor ruso Antón Chejov (1860-1904). Realizó sus estudios médicos en Moscú. Como médico, se destacó por su diligencia y altruismo. Como escritor, sugirió varias recomendaciones para alcanzar la excelencia en el arte de escribir. Fue un maestro en los relatos breves y en el análisis psicológico de sus personajes. Sus novelas cortas y, sobre todo, sus obras teatrales El Jardín de los Cerezos, Las Tres Hermanas y La Gaviota, lo proyectaron inicialmente en Norteamérica. El autor finaliza exponiendo algunos pensamientos de Chejov.

(En Índice de números y autores de la RSVHM 1945 – 1999).

 


[En la SVHM. De izquierda a derecha los doctores: Malaspina, Krivoy y Puigbo]

 

 

 

 

 

 

PIOTR KROPOTKIN SOBRE ANTÓN CHÉJOV

 

[6]

PIOTR KROPOTKIN SOBRE ANTÓN CHÉJOV

 



Edgardo Rafael Malaspina Guerra

1

El pensador ruso Piotr Kropotkin (1842-1921) en “Los ideales y la realidad en la literatura rusa” (1905) dice que Antón Chejov es de todos los novelistas rusos el más original en el sentido amplio del concepto. Luego explica que Chéjov no trata de sorprender a los lectores con efectos estilísticos porque rechazaba tales artificios.

 

 

 

 

 

2




[Piotr Kropotkin]

 

Chéjov escribió con la misma sencillez que Pushkin, Turguenev y Tolstói.

3

Chéjov escribió sobre todos los temas de la vida rusa , los cuales; no obstante, tienen significación universal porque tocan las fibras de lo cotidiano y la esencia del alma humana.

4

Chéjov estudió en el Gimnasio y en la Universidad de Moscú. Más tarde escribiría:  "En aquella época yo no estaba bien informado acerca las Facultades y no puedo recordar ahora por qué había elegido la de medicina, pero jamás me arrepentí de esa elección".

5

Trabajó como médico en un hospital de aldea cerca de Moscú y se ofreció voluntariamente de médico de distrito durante la epidemia de 1892.

6

El pensamiento científico adquirido durante sus estudios de medicina fueron muy importantes para desarrolla su carrera literaria.

7

“A medida que pasaban los años, trataba los más profundos y complicados problemas de la vida, al propio tiempo que la forma de sus producciones iba haciéndose cada vez más bella y pulida. Cuando Chéjov murió, en 1904, a la edad de cuarenta y cuatro años, su talento había alcanzado su completa madurez. Su última obra, un drama, contiene rasgos poéticos tan delicados y una melancolía poética está en ella tan entremezclada con la aspiración por las alegrías de una vida colmada, que parecía que iniciaba una nueva fase en su labor; pero ya se sabía que la tuberculosis minaba rápidamente su vida”.

8

“Nadie como Chéjov logró describir los fracasos de la naturaleza humana en nuestra actual civilización, y especialmente el fracaso, la bancarrota del hombre civilizado frente a la bajeza que rodea toda la vida cotidiana. Esta derrota del "intelectual" la ha pintado Chéjov con una fuerza admirable, de un modo variado e impresionante. Y ahí reside el rasgo particular de su talento”.

9

La bajeza que pinta Chéjov comienza con la pérdida de la fe en las fuerzas propias y en la pérdida progresiva de todas esas esperanzas luminosas e ilusiones que constituyen el encanto de toda actividad.

10

El hombre llega a un grado en que sólo puede repetir mecánicamente ciertos actos cotidianos, y se va a acostar satisfecho de haber "matado" el tiempo de alguna manera.  De este modo se hunde poco a poco en una completa apatía espiritual y en la indiferencia moral.

11

Chéjov no intentó nunca escribir novelas grandes. Su dominio es el cuento corto, en el que era un verdadero maestro; jamás se propone ofrecer la historia completa del sus héroes, desde la cuna a la tumba; ese no es el camino adecuado para el relato breve.

12

La risa es siempre un paso hacia la reconciliación.

13

El "dolor chejoviano" es tan característico de sus trabajo como el profundo surco de su rostro bondadoso con sus ojos vivos y meditabundos.

14




[Original del Jardín de los cerezos. Museo de Chéjov. ERMG]

 

“El jardín de los cerezos fue su canto de cisne, y en las palabras finales de este drama resuena una nota llena de esperanza en un porvenir mejor. El jardín de cerezos, que pertenecía a una antigua familia de la nobleza y era un verdadero jardín de hadas cuando los cerezos estaban en completa florescencia y los ruiseñores cantaban en su espesura, cae derribado despiadadamente por un hombre de dinero, por un burgués. A él no le interesa la poesía del jardín floreciente, ni el canto de los ruiseñores; lo único que necesita es dinero. Pero Chéjov ve lo que ocurrirá en el porvenir;  ve cómo el jardín pasa otra vez a nuevas manos y en su lugar surgirá un nuevo jardín: un jardín en que todos hallarán la dicha en un ambiente renovado. Personas que sólo han vivido para sí no podrían jamás plantar semejante jardín; pero ha de venir el día en que lo harán gentes como Ani, la protagonista, y su amigo, el "eterno estudiante".